¿Quién no recuerda las muchas charlas alrededor de confortable y calentita mesa camilla de la abuela?, porque sí, porque todos sabemos que no se puede evitar imaginar de las amorosas abuelas cuando vemos una esa camilla.
Sobre todo en el sur de España, la mesa camilla era un mueble que no podía faltar. Su forma preparada para instalar un brasero era muy poco estética, de aglomerado y las patas de pino o de haya macizas, dependiendo del presupuesto del que dispusiera para destinar a ella. Como decimos era poco estética, pero cumplía totalmente con su función, sujetar el brasero y proveer de calor a la familia que se sentaba alrededor de ella.
Como eran tan funcionales, las mesas camilla estaban en casi todos los hogares, además daban calor a a los hogares. Así mismo se usaban como mesa mesa camilla cuadrada de comedor aprovechando el poco espacio que tenían disponible en ocasiones.
Generalmente la mesa camilla se cubría con una falda que en invierno era de un tejido que abrigaba y por lo general en colores cálidos, y en verano se sustituía por otra falda más fresca y de colores más acordes a la temporada. Al mismo tiempo se retiraba el soporte del brasero, una pieza que se podía desmontar, ya que con el calor ya no lo gastaban.
Arriba de la mesa camilla se ajustaba un cristal de cantos pulidos de igual tamaño que el diámetro de la mesa con la intención de resguardar el tejido de la falda de la suciedad y los roces.
Y llegamos a la actualidad, hoy en día la mesa camilla dispone de un gran número de apasionados de su uso pero también cuenta con algunos detractores.
Bastantes no quieren prescindir la mesa camilla, el poco espacio, la costumbre, la comodidad e incluso su fantástico precio convierten a la mesa camilla en un mueble apreciado por muchos usuarios. Por el contrario, otros que piensan que es poco estética.
Si hablamos de estética es necesario reconocer que este modelo de mesa ha mejorado mucho, en este momento se pueden comprar además de redondas rectangulares o cuadradas.
Su misión ya no se reduce a servir de una mesa de comedor o a acoger un brasero, en la actualidad eléctrico, en estas fechas es posible encontrar mesas camillas más pequeñas que se usan mesitas auxiliares en el comedor, el salón y también en el dormitorio.
Es cierto que no ha cambiado es la estructura interior es la estructura interior que sujeta el brasero y que aun hoy tenemos que reconocer sigue siendo poco estetíca, aunque al quedar oculta por la falda no queda a la vista y conseguimos una mesa camilla entrañable y encantadora como antaño. Además dispones de la probabilidad de seleccionar un modelo de mesa camilla donde esta estructura es de quita y pon y una vez llega el buen tiempo quitar la falda y dejar al descubierto una mesa tradicional.
Por otro lado podemos combinar el tejido de la falda de la mesa camilla con el de los cojines, las cortinas y cualquier otro complemento textil, consiguiendo una decoración y un ambiente armonioso y a nuestro gusto
Hemos visto que algunos diseñadores de interiores y decoradores actuales cuentan con una mesa camilla en su vivienda, artistas de la decoración que les encanta ese toque entrañable a la vez que decorativo y prácticoen sus comedores.
Una mesa camilla es un clásico y desde ya es más sencillo adquirir una. Comprar una mesa camilla online es cómodo, fácil y rápido, selecciona el tamaño, la calidad y el estilo, espera a recibirla en casa cómodamente y disfruta de los mejores momentos sentado junto a la mesa.